Asma en niños y adolescentes 

El asma en niños y adolescentes presenta algunas particularidades distintivas en comparación con los adultos, por tanto, requiere un enfoque especializado adaptado a su edad y necesidades individuales. Un diagnóstico médico y tratamiento adecuados son imperativos, así como el apoyo continuo de los padres y la escuela. La mayoría de los niños y adolescentes con asma pueden llevar una vida activa y saludable. A continuación te presentamos algunos puntos importantes a tomar en cuenta.

Síntomas diferentes: Los síntomas del asma en niños y adolescentes pueden variar y pueden ser más difíciles de reconocer que en los adultos. Los síntomas típicos incluyen sibilancias (silbidos al respirar), tos, dificultad para respirar y opresión en el pecho. Sin embargo, los niños más pequeños pueden tener dificultades para expresar sus síntomas o pueden presentar síntomas atípicos, como fatiga, irritabilidad o problemas para alimentarse.

Desencadenantes: Los desencadenantes del asma en niños y adolescentes suelen ser diferentes a los de los adultos. Los alérgenos, como el polen, el polvo o los ácaros, son desencadenantes comunes en esta población. Además, las infecciones respiratorias, el ejercicio físico, los cambios de clima y los irritantes ambientales, como el humo del tabaco, también pueden desencadenar los síntomas asmáticos.

Diagnóstico diferencial: El diagnóstico del asma en niños y adolescentes puede ser más desafiante que en los adultos debido a la variabilidad de los síntomas y la dificultad para realizar pruebas de función pulmonar precisas en niños pequeños. Los médicos evaluarán los antecedentes médicos, los síntomas actuales, el examen físico y, en algunos casos, realizarán pruebas de función pulmonar especializadas adaptadas a la edad del niño para llegar a un diagnóstico adecuado.

Enfoque de tratamiento: El tratamiento del asma en niños y adolescentes se basa en un enfoque de control a largo plazo, con el objetivo de prevenir los síntomas y minimizar las exacerbaciones. Se utilizan medicamentos como broncodilatadores de acción rápida y corticosteroides inhalados como tratamiento de mantenimiento. Los médicos también pueden recomendar un plan de acción individualizado para el manejo de las exacerbaciones y la prevención de desencadenantes.

Participación de la familia y la escuela: En el caso de los niños y adolescentes, la participación activa de los padres y el apoyo de la escuela son cruciales para el manejo efectivo del asma. Los padres deben aprender a reconocer los síntomas, administrar los medicamentos según las indicaciones y comunicarse de manera efectiva con los proveedores de atención médica. Además, es importante que las escuelas estén informadas sobre el asma del niño y tengan un plan de acción para gestionar los síntomas y situaciones de emergencia.

En resumen, el asma en niños y adolescentes requiere un enfoque especializado. Un diagnóstico y tratamiento adecuados, la identificación de síntomas diferentes y desencadenantes, así como la participación activa de los padres y la escuela, son clave para una vida activa y saludable.

Una médica terapeuta respiratorio, con bata y estetoscopio azul, sonríe en un fondo gris.

Dra. Sonia Silvia Rodríguez Solórzano

Medica Cirujano y Partero, Terapeuta Respiratorio Certificado.

Considero fundamental proporcionar no solo tratamiento médico, sino también una guía educativa y apoyo continuo a los pacientes y sus familias. Abogando por estrategias efectivas de prevención y control, mi objetivo es empoderar a los jóvenes afectados para que lleven una vida activa y saludable, minimizando las limitaciones impuestas por el asma y mejorando su calidad de vida a largo plazo.